Tras la revolución, represión
Andamos estos días en conmemoraciones y efemérides (que sabéis que me encantan) y yo, con la cámara en el hombro, busco testimonios de la Revolución de Octubre. Podría, realmente, preguntar a cualquier persona mayor de 75 años y hallaría una historia horripilante y dolorosa.
Y están deseando contarlas. No es difícil tirarles de la lengua y que se pongan a hablar. A veces, conocen con todo lujo de detalles acontecimientos que en los libros de historia ocupan un par de líneas. A veces, son sólo impresiones, imágenes, sentimientos del niño que eran por aquella época.
Los hechos, las situaciones, se repiten una y otra vez con pequeñas variaciones. Y no por ello son menos conmovedoras, menos tristes, menos en blanco y negro.
Pero hay millones de esos recuerdos de la revolución y la guerra, del hambre y la ira, que ya nunca quedarán grabados en ninguna parte. Y miles que se perderán en muy poco tiempo sin que nos dé tiempo a conseguirlos. Realmente es algo desesperanzador.
Claro que esto ya lo resumió Ismael Serrano en una canción.
La verdad que me aprendo un montón a tu lado... Tengo muchas ganas de que montes el siguiente vídeo, este CHAPÓ :-D
ResponderEliminarMe encanta hacer estas cosas... pero siempre me parece que me faltan tiempo y recursos para que queden como deberían.
ResponderEliminarPero tú lo compensas con tu ingenio (y no es un piropo)
ResponderEliminarCreo que los trabajadores tenemos una deuda moral con estos heroes en muchos casos anonimos que en tiempos dificiles lucharon por lograr unas condiciones sociolaborales mas justas sin pensar que su afiliacion o simpatia por un grupo politico u otro les iba a reportar poltronas
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